Buen servicio, buenas putas. Escríbanle como quieran que de todas maneras responden, lo considero malo porque siempre se tardan un ratón pero responden. Sugiero enviarles pollas y videos porno, como sea son profesionales en lo que hacen y como mencioné previamente cobran barato, pregunten por sus productos, detalles y demás, 100% recomendado.

Okey, suena muy crudo y cruel pero juro que ya no sabia ,como controlarme, tengo 25 años, la morra esta unos 20,, es menor que yo pero no es ilegal, el chavo este es mi mejor amigo desde el kinder, le conozco hasta los granos del culo.
Se que es muy ogete que me la haya cogido pero es q si la vieran, hasta en la mirada grita lo zorra, es como una egipcia con culo grande y ojos de perrita, un poco misogino como me refiero a ella, pero es que estoy al borde de la locura, sueño con ella y me levanto empalmado, es inteligente, sarcástica, peleonera, sabe de política, es q mierda es perfecta y la veo un poco mía.
La situación pasó en el cumpleaños de mi mejor amigo, nos fuimos juntos a buscar las decoraciones en el carro, el carro se nos atasco y quedamos varados en la ruta a las 9 de la noche, ella se empezó a reír y como cosa o otra nos besamos por primera vez, no se que fue, pasión, locura, deseo, alcohol, que mierda se pero fue el mejor beso de mi vida, luego de eso, ella se me alejo y no volvió a mencionar una puta palabra en lo que quedaba de noche, pasaron los días y llegó el sábado, mi amigo nos invito al antro pq cumplían mes, se que es muy mierdas de mi parte pero me la lleve a escondidas al baño cuando estábamos demasiado pedos, ella se empezó empezó reír y entre broma y broma nos besamos de nuevo, una cosa llevó a la otra y pasó lo que debía, no se si pq fue un rapidin o que pero me dejó con ganas de más.
Y para ser honestos me dan unos celos terribles el que este xon mi amigo. El que duerma con el, que se acueste con el, que lo ame a él, es como si la viera como mía
Esto pasó hace 2 semanas, yo le mando mensajes y la morra me clava el visto, evita cualquier encuentro y se hace la pendeja, la culpa me jode pero también me jode la obsesión que tengo con ella, y al mismo tiempo me duele demasiado perder a mi mejor amigo
Saquense las etiquetas morales y díganme que mierda hacer? Creo q me encule.

Todos los argumentos que fui recordando haciendo un poco de memoria de todas las barbaridades que dijo este tipo. La verdad que es tanta cosecha de mierda la de Milei que un poco me fui olvidando. Si tiene para aportar estaría buenísimo.
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1. No tiene experiencia, debuta políticamente en la presidencia con un armado político sin experiencia y medio pelo, ya con eso se que puede chocar feo por no saber dónde está parado, es muy complejo el estado y el poder para andar improvisando con alguien que no sabe un carajo del aparato. Macri con todos los años previos que tuvo la chocó por no saber y tener un equipo de cuarta.
2. Villarruel se dice ser experta en seguridad pero la mina no gestiono ni la seguridad de un boliche. Habla mucho pero nunca hizo nada más que boludear con los genocidas todo el día.
3. Tiene problemas con todos: es un tipo conflictivo con problemas con la oposición, su propio partido, gremios, gobernadores por la coparticipación, medio de comunicación por los juicios que le hizo a periodistas, etc. Es un tipo claramente con inestabilidad mental y problemas de tolerancia, data registrada de sobre en los últimos 4 años desde que salió en Intratables.
4. Inestabilidad personal: Se altera por ruido en un estudio de Tv o ruido de tos, imagínate tener el peso que implica la responsabilidad de la salud de todo un país. Cómo va a sobrellevar los momentos de inestabilidad política y social si no se puede bancar un poquito de ruido que ya se desestabilidad emocionalmente. Esto es completamente objetivo porque está a la vista de todos que tiene problemas.
5. Macri le tomo el partido: esto es obvio, Macri tiene mil veces mas poder que Milei, a quien crees que van a responder su gente? al que tiene plata y poder o al boludo que no esta muy bien del bocho?. Ya se le empezaron a ir varios.
6. Liberar económica y tipo de cambio: Si hace esto no dura ni una semana. Liberar el tipo de cambio es que el oficial suba para arriba al precio del blue, como mínimo es un 170% de devaluación. + Liberar precios y quita de subsidios es bastante una locura, por más que saqué impuestos a las empresas no veo más que un desplome total del poder adquisitivo. A parte de desfinanciar a las pymes que son las que generan mayor cantidad de puestos de trabajo. El consumo se desplomaría y se caería la industria. La realidad es que es un suicidio, yo por lo menos creo mas es una salida gradual a los problemas. Claramente se genera una híper en esa situación. No la quiero vivir y menos con Villarruel en seguridad. Ahora estamos en crisis pero la diferencia es que hay trabajo y hay algo de consumo y actividad. En conjunto con las privatizaciones solo son medidas para regalar el país a un precio muy barato. Nos vamos a arrepentir toda nuestra vida de esto.
7. Villarruel en seguridad: Es lo que más me preocupa si llega a ganar, la mina claramente no se la bien de la cabeza y tiene una obsesión con los militares, en tiempos violentos como lo que puede llegar a generar un hiper es todo un tema tener a esta mina en seguridad. No la veo bien, es muy demente.
8. Pro dictadura: Ellos son pro genocidas, no solo Villarruel que ya está más que chequeado y es casi innegable, sino también por parte de Milei que tiene un armado teórico a favor de la ideas de Massera, "la idea de la guerra". Algo que ya se estudió hace mucho tiempo y no fue así. Me preocupa la idea de recortar el estado y aumentar el presupuesto en militares, me preocupa la idea a favor que tiene sobre la colimba. Obvio que no lo van a decir pero parece indicar que viene por esa línea.
9. Liberar el comercio ya se hizo en los 90 y fue un fracaso total: Arg nunca le pudo seguir el ritmo a EEUU o al resto del mundo en términos de producción, le falta mucha industrialización. Hizo mierda la industria y terminó en un Hiper. En los 90 se privatizó todo y aun así con todo lejos del estado quedamos en un híper sin precedentes, fue terrible. Los dos periodos de caballo fueron un desastre en todo sentido.
10. El estado tiene mucho protagonismo en el comercio con Brasil y China: Tanto de nuestra parte como la de ellos. No creo que el estado chino quiera abrir negocios con Arg teniendo a un tipo así de presidente, no son boludos. Si el tipo cree que Arg tiene el mando en esto es un Gil, porque el control de china sobre sus empresas y el comercio es demasiado incluso para EEUU. Y Lula en Brasil es mucho más grande que Arg en todo sentido. Creer que Arg toma las decisiones es una gilada. Los estados que controlan el comercio es China, Brasil y el resto. Nuestra participación es menor y dependemos de los mercados que pueda abrir o no espacios como el Mercosur.
11. Dolarización: Obviamente es inviable, pero su lógica de querer cerrar el banco central genera una expectativa a futuro muy mala y de mucha incertidumbre. Lo que va a pasar que todo el mundo va a retirar sus inversiones y dólares de Arg. Todo se trata de confianza y es lo ultimo que genera. Es más la ultimas notas que fui leyendo del mercado es que si gana caen las acciones a la mierda. Nadie confía en Arg y menos en un desequilibrado como Milei. Súmale a todo los problemas uno enorme con una guerra contra el Sistema Bancario. Recorda que el tipo es anarquista, eso te dice mucho y al mercado también. Ni el fondo le tiene confianza. Si tuviera dólares abajo en el colchón vas a irías a un mercado a pagar con eso? no lo vas hacer por mas que tengas un vuelto, porque si no generas valor en dólares cagaste. Arg no genera tanto valor como para seguirle el ritmo a EEUU
12. Recorte del 15% del PBI: es imposible sin recortar educación, salud y coparticipación. 15 puntos también significa para la obra publica que es motor del empleo, aunque sea bajos salarios lo que sostiene esta crisis es que hay empleo. Hay una enorme diferencia entre tener ingresos mínimos para vivir el dia a dia a no tener nada. Sufrir el hambre te vuelve loco, yo lo viví en el 2001 cuando tenia 6 años mi familia estaba muy mal. La obra pública empleo a muchos insumos y trabajo indirecto, es una animalada lo que quiere hacer.
13. Problemas con el poder judicial: Rossati ya se manifestó en contra de Milei y sus ideas.
14. Sin congreso: Le pueden hacer juicio político.
15. Desocupación: Con Macri la desocupación subir arriba del 12 puntos y con Alberto bajo a 6, es lo que sostiene el consumo y la crisis.
16. Mi mayor miedo: Si renuncia Milei y toma el poder Villarruel con los militares. Es un demente esa mina, no tenemos idea como piensa realmente, va a ser durísimo.
17. Represión: Creo que si pasa la mayoría de las cosas va a ver represión y muerte en manos de Villaruel.
18. Sumale el problema con el sistema educativo: El voucher es un sistema malísimo, es una idea de control estatal sobre el acceso a la educación universitaria, poniéndole límites de edad entre otras cosas. Sin poder diseñar políticas educativas serias a largo plazo, por ejemplo en las carreras o universidades que tienen poca demanda pero son esenciales para el desarrollo del país en la lógica del voucher quedaría desfinanciada. Son ideas inmaduras y boludas. La idea es un cagada porque las públicas quedan desfinanciadas y se concentra todo en la privada cortando el acceso de educación de calidad como hay en la UBA o UNLP a la clase media y baja.
19. No creo en el modelo de estado de Milei pero no se trata de su ideología en sí, sino de cómo piensa aplicar todo eso.
20. El regreso de la colimba: Dentro de toda la lógica de pensamiento que tiene esta es una posibilidad muy clara y es para quilombo.
21. De todo este posible daño vamos a tardar décadas en recuperarnos. Con Macri el salario promedio en dólares paso de 2015 a 1500 con un tendencia arriba hasta el 2017 casi llegando a 2000 y el tipo lo desplomo en 400- De eso todavía no nos recuperamos.
22. Anti cuarentena, Anti vacunas, Anti cambio climático.
23. Todo sus pensamiento anti argentina y demencial:

-propuso libre ventas de armas
-quiere eliminar el Museo de Memoria Esma
-reivindico a Massera en el debate repitiendo sus palabras
-Reivindico a la hija de remil puta de Thatcher
-Quiere vender vaca muerta.
-Su diputada dijo que su primer proyecto de ley es la renuncia a la paternidad.
-Voto en contra de la ley de Cardiopatías congénitas
-Clonó a sus perros!!!
-Es pelotudo a cuerda.

Does anyone know who is sampled on the song when they say the Spanish line “anoche, una puta locura”?
I seriously believe it’s the character Tokyo from Money Heist (not a coincidence that in the next line he actually says Tokyo), but I can’t confirm this! It sounds soo much like her and very likely to be a line from the show. What do you guys think?!

Son las 6 de la tarde. Mantengo desde hace rato el lápiz frente al papel, en el hay varios garabatos de la clase de hoy. Después una mueca empiezo a juntar mis cosas; la clase ya terminó y escucho a los profesores que se quedan hablando de que no les gusta tener que votar por X pero no ven alternativa. Saliendo del aula, por los pasillos escucho gente riendose por los memes del último debate. "Por si o por no" Juguetean riéndose.
A fueras del edificio, me reuno con unos amigos a comer algo en el comedor, algunos apoyan a Y porque dicen que representa un verdadero cambio, estan hartos. Algunos se pelean, dicen que es mejor votar en blanco, otros lo contradicen porque indirectamente implica votar a X.
Me despido y en el camino leo los carteles colgados en los alrededores: "Defendamos la educación pública" señalan. Mi atención se dirige al techo vidriado de la entrada a otro edificio, los días de lluvia se inunda el suelo porque el agua corre por los agujeros rotos de cristal.
Mientras camino por la vereda, pierdo por un momento el balance y escucho el sonar de una baldosa, habían varias sueltas en el piso. Puteo en voz baja y acomodo mi andar como si nada hubiese pasado. Entretanto espero a que pasen los autos, el viento ondea una pancarta con letras azules, una figura sonriente ocupa el centro del papel.
Por la avenida, veo como pasan de largo 2 bondis que me hubiera gustado tomar, los dos a reventar de gente. Mi cuerpo se siente cada vez más pesado. a mi costado, una pancarta enorme remarca: "Viene la Argentina que estabamos esperando". El semáforo da paso y me apresuro a avanzar.
Ya en la parada, la gente se amontona para esperar los micros. Alzo la cabeza y veo a un flaco que se para en frente mio; "Te puedo hacer una pregunta, con todo respeto?" me dice. Automáticamente le respondo con una sonrisa irónica, ya sabiendo lo que quería. "Gracias, maestro, no". "Estoy vendiendo unas medias" insiste. Diviso un bondi a lo lejos, "Gracias, maestro, no".
Dejo mi mochila en el suelo y me acomodo cerca del fondo del micro, no puedo evitar rechistar al ser levemente empujado por los que pasan.
La gente se ve exhausta, son las 8 de la noche. La paciencia es una rareza a estas horas.
Un chirrido insoportable suena por delante, mis pies se giran y me sujeto fuerte a la baranda para no perder la postura, la mina a mi izquierda no tiene tanta suerte y me termina pisando. No puteo esta vez. "Maneja bien flaco!" Gritan del fondo.
Lentamente los departamentos desaparecen y se transforman en moradas humildes. El micro se vacía poco a poco. Me siento como el orto; es lo único que pasa por mi cabeza. Un cartel prominente cuelga afuera con título: "Viene la Argentina que estabamos esperando". No puedo evitar fruncir el ceño y apretar el puño. Soy el único que lo ve? Se que ustedes tambien. Mi mirada recorre los asientos, no puedo más que seguir apretando la barandilla. Por qué no se levantan, por qué no se enojan. Estamos todos viviendo una comedia y todos lo sabemos. Estamos tan acostumbrados a la locura que ya la vemos algo cotidiano. Qué estamos haciendo, Qué es lo que está pasando, hermano. En mi cabeza se proyecta el cartel político junto con el flaco que vende medias. Se oye el chirrido de los frenos nuevamente.
"Vayanse a la puta que los pario."

yo los invito en casa a poner en google porno de patricia bullrich, y lo van a ver, a patricia bullrich haciendo petes. bien puta

Yo voy a empezar con los equipos que me cai bien de Brasil.
Sao Paulo (El más grande de Sao Paulo sin dudas, campeones de todo ganando al hijo del Real Madrid en el 1992, cogiendo al rossoneri y al Liverpool de gerrard)
Atlético Paranaense (Llegaron lejos a la libertadores perdiendo la final contra Flamengo y tienen dos Sudamericanas encima ganandole al Palmeiras en el Allianz en las semifinales, CHUPA PORCADA HIJO NUESTRO!)
Cruzeiro: Fueron uno de los brasileños que se codeaban con los que poseían mas titulos a escala internacional. El siglo 20 Cruzeiro fue cuadro bastante respetado a nivel local, no tienen poco aunque en la copa de Brasil es el más veces campeón. Es un club con un palmares respetable.
Ahora, aca llegamos a los clubes de brasil que me cai re contra mal
Palmeiras: El equipo más veces campeon de la Serie A de Brasil y tienen 3 Libertadores, pero no tienen un mundial y se fueron 2 veces a la B. EQUIPO CHICO DESCENDIDO Y SIN MUNDIAL!
Corinthians: Mamita. Siempre cuando juegan contra Boca se convierten en el Real Madrid los hijos de re mil puta. tanto la final de 2012 con en octavos el año pasado. Tuvieron un tremendo ojete contra Estudiantes en la sudamericana, pero Fortaleza los bajo de su nube en las semifinales.
Flamengo: Si hay algunos jugadores que me cae mal, sin dudas son David Luiz y el vende humo de Gabigol. El equipo con mas seguidores en las redes sociales sin duda, pero cuándo golean, se ponen muy agrandados especialmente los hinchas y luego le remontan como en octavos contra Olimpia, perdieron la final de copa contra San Pablo,la copa carioca contra el flu, y la recopa contra Independiente del Valle. Toma Gabigol la concha de tu madre! Solo tenes 1 mundial hijos de puta.
Lo que se va venir en los comentarios. Prepárense. 🤙

[Encerrado] Real Madrid 3 x 0 Braga

Gols Real Madrid: Brahim Díaz (26/1T), Vini Jr. (12/2T), Rodrygo (15/2T) Gols Braga: N/D
Champions League - Fase de grupos Estádio: Santiago Bernabéu Data: 8 de Novembro de 2023, 17:00 Transmissão: TNT Sports, HBO MAX Link para Live Match Thread Post-Match Thread: https://www.reddit.com/futebol/comments/17qwq36/postmatch_thread_champions_league_real_madrid_3_x/
Escalações:

Real Madrid (4-4-2)	Braga (4-3-3)
Lunin, Lucas Vázquez (Carvajal), Nacho Fernández, Rüdiger, Mendy (Fran García), Camavinga, Valverde (Nico Paz), Kroos, Brahim Díaz (Modric), Rodrygo (Joselu), Vini Jr.	Matheus, Víctor Gómez (Joe Mendes), José Fonte, Niakaté, Cristián Borja, Vitor Carvalho, João Moutinho, Zalazar (Al-Musrati), Djaló (Banza), Ricardo Horta (Abel Ruiz), Bruma (André Horta)
Suplentes:	Suplentes:
Piñeiro, Alaba, Bellingham, Güler	Hornícek, Saatçi, Paulo Oliveira, Adrián Marín, Castro, Pizzi, Rony Lopes
Técnico: Carlo Ancelotti	Técnico: Artur Jorge

Arbitragem: Halil Umut Meler (Árbitro Principal)

Lances

Começa o Primeiro Tempo! 00/1T BOLA ROLANDO! Começa o jogo no Santiago Bernabéu! 03/1T É PÊNALTI! Linda jogada do Braga pela esquerda! Borja tabela com Bruma (que deu de calcanhar) e invade a área. Lucas Vázquez comete a falta! 04/1T 🟨 Cartão amarelo para Lucas Vázquez. 05/1T PERDEU! Djaló chuta fraco, do lado esquerdo, e Lunin pega a cobrança! 06/1T OPA! Rodrygo recebe a bola pelo lado esquerdo, entra na área e cai após disputa com Niakaté! Arbitragem manda o jogo seguir. 08/1T EITA! Depois de dois levantamentos na área, Valverde e Niakaté se chocam de cabeça. Cena feia. 11/1T NÃO VALEU! Erro na saída de bola do Braga. Valverde toca para Vinicius Junior, que recupera a bola. Ela sobra para Brahim Díaz, que chuta rasteiro para o fundo do gol. Lance anulado, por falta do atacante brasileiro. 16/1T AH! Pressão do Braga. Levantamento de João Mourtinho encontra Djaló livre, mas sem equilíbrio para o chute certo no gol. 19/1T QUASE! Após vacilo de Lucas Vázqueza, Bruma recebe na ponta esquerda, humilha Mendy no drible e... é desarmado pelo lateral-direito. 20/1T UH! Vinicius Junior capricha no cruzamento de trivela para Valverde, que puta para finalizar! Chute vai para fora. 25/1T UH! Vinicius Junior recebe a bola na ponta esquerda, vai limpando e chuta no gol! A bola desvia em dois marcadores. 26/1T ⚽ Gol do Real Madrid! Gol de Brahim Díaz! Mendy estica para Rodrygo, que chega na linha de fundo e toca para trás. Brahim Díaz chega batendo de primeira e de canhota, na entrada da pequena área! 31/1T OPA! Falta de Zalazar em Rodrygo. Boa oportunidade para o Real. 37/1T AH! Vinicius Junior recebe a bola na entrada da área e busca o espaço para o chute, mas é desarmado pela marcação dupla. 41/1T UH! Rodrygo recebe de Brahim Díaz, gira o corpo e chuta cruzado, de canhota! Boa defesa do goleiro Matheus. 47/1T FIM DE PAPO! Termina o primeiro tempo. 47/1T ⏱️ Termina o Primeiro Tempo!   Começa o Segundo Tempo! 00/2T BOLA ROLANDO! Começa o segundo tempo. 09/2T PERDEU! De Rodrygo para Vinicius Junior, de Vini Jr para Brahim Díaz. Atacante chuta no gol quase da pequena área, mas arremate é fraco, e goleiro Matheus consegue espalmar! 11/2T UH! Bom chute de Rodrygo, da entrada da área! Matheus defende em dois tempos. 12/2T ⚽ Gol do Real Madrid! Gol de Vinicius Junior! Depois da boa troca de passes, Valverde aciona Vázquez, que toca para Vinicius Junior. Ele domina, tira a marcação e chuta rasteiro, sem chances para o goleiro! 15/2T ⚽ Gol do Real Madrid! Golaço de Rodrygo! Contra-ataque fatal! Rodrygo arranca, toca para Vinicius Junior, recebe na frente e finaliza com categoria, por cima do goleiro! 16/2T 🔃 Substituição no Braga: SAIU: Ricardo Horta, ENTROU: Abel Ruiz. 17/2T 🔃 Substituição no Braga: SAIU: Zalazar, ENTROU: Al-Musrati. 17/2T 🔃 Substituição no Braga: SAIU: Víctor Gómez, ENTROU: Joe Mendes. 18/2T UH! Depois da boa troca de passes do Real na entrada da área adversária, Rodrygo recebe na esquerda, puxa a bola para o lado e chuta forte de canhota! Bola pega na rede pelo lado de fora. 19/2T NÃO PARA! O Real Madrid segue criando chances. Agora é de Valverde, de canhota. Pena que o chute saiu torto. 25/2T AH! Vinicius Junior avança pela esquerda e ajeita para Valverde, que chuta em cima dos defensores do Braga. 26/2T UH! Lindo drible de Vinicius Junior na ponta esquerda, em cima de Joe Mendes! Pena que o passe dele para Rodrygo foi interceptado. 27/2T 🔃 Substituição no Real Madrid: SAIU: Lucas Vázquez, ENTROU: Carvajal. 28/2T 🔃 Substituição no Real Madrid: SAIU: Brahim Díaz, ENTROU: Modric. 31/2T 🔃 Substituição no Braga: SAIU: Djaló, ENTROU: Banza. 31/2T 🔃 Substituição no Real Madrid: SAIU: Valverde, ENTROU: Nico Paz. 31/2T 🔃 Substituição no Real Madrid: SAIU: Rodrygo, ENTROU: Joselu. 32/2T 🔃 Substituição no Braga: SAIU: Bruma, ENTROU: André Horta. 34/2T UH! Lindo passe de Vinicius Junior para Modric. O croata invade a área e tenta o toque para Joselu, mas a defesa adversária corta. 37/2T AH! Vinicius Junior segura a bola na ponta e depois toca para Mendy. Pena que passe foi muito na frente. 38/2T 🔃 Substituição no Real Madrid: SAIU: Mendy, ENTROU: Fran García. 48/2T SALVOU! Bela cabeçada de Abel Ruiz! Pena que Lunin salvou lindamente! 48/2T FIM DE PAPO! Termina o segundo tempo! O Real Madrid vence o Braga por 3 a 0 e se classifica para as oitavas de final da Champions League. 48/2T ⏱️ Termina o Segundo Tempo!   Fim de Jogo!

English: Soooo… Today’s day 1 was… Something… LMAOO I was watching Philza’s POV who’s in red team and it was fucking mental!! (Literally.) So what did you guys think and how was you guys’s experience?
Español: Muuuuuy… El día 1 de hoy fue… Algo… Jajajaja Estaba viendo el punto de vista de Philza, que está en el equipo rojo, ¡y fue una puta locura! (Literalmente). Entonces, ¿qué pensaron ustedes y cómo fue su experiencia?
Português: Então... O dia 1 de hoje foi... Algo... Kkkkkkk
Eu estava assistindo o POV da Philza que está no time vermelho e foi muito mental!! (Literalmente.) Então, o que vocês acharam e como foi a experiência de vocês?
Français: Alors... Le premier jour d'aujourd'hui était... Quelque chose... PTDR
Je regardais le POV de Philza qui est dans l'équipe rouge et c'était putain de mental !! (Littéralement.) Alors, qu'avez-vous pensé et quelle a été votre expérience ?

Cheetito pendejo del planeta, tiene porno futanari yuri peludo y un montón de maricones que están jugando futbol sexual abusando de la pelota, joder, Cheetito, se está cogiendo a una ventana, solo se caga en el pene. A Cheetito le cubren el pene de vidrio por intentar meter su pene en la boca de su familia, se tira pedos en plena conferencia sexual y tiene orgasmos en el maldito ojo, maldito hijo de puta pendejo. Maldito Cheetito, penes visuales porque lo hacen ver como un maricón homosexual, baila con una pluma bien gay, maldito Chitito insultó a su vecino y lo encerraron en una maldita cárcel por cachondo. Tiene demasiado sida crónico, tiene un tumor en el pene y es un pedazo de mierda, le jodieron en la puta cabeza, le vuelven loco los putos penes, estoy cocinando porno casero muy caliente hasta reventar. bola de culo Cheetito pendejo del planeta, tiene porno futanari yuri peludo y un montón de maricones que están jugando futbol sexual abusando de la pelota, joder, Cheetito, se está cogiendo a una ventana, solo se caga en el pene. A Cheetito le cubren el pene de vidrio por intentar meter su pene en la boca de su familia, se tira pedos en plena conferencia sexual y tiene orgasmos en el maldito ojo, maldito hijo de puta pendejo. Maldito Cheetito, penes visuales porque lo hacen ver como un maricón homosexual, baila con una pluma bien gay, maldito Chitito insultó a su vecino y lo encerraron en una maldita cárcel por cachondo. Tiene demasiado sida crónico, tiene un tumor en el pene y es un pedazo de mierda, le jodieron en la puta cabeza, le vuelven loco los putos penes, estoy cocinando porno casero muy caliente hasta reventar. bola de culo

Cuando volvimos, vimos a los otros dos medio raros en el campamento, les preguntamos y nos dijeron que en una zona mas tupida, escucharon un bicho rompiendo ramerio, como si los hubiera visto y hubiera disparado, ta sera algun ciervo o un zorro pense y lo dejamos ahí. Y la segunda noche llego, teniamos planeado irnos al otro día en la tarde para aprovechar también medio día. Bueno, estabamos ahí, habiamos apagado la radio y estabamos comiendo asado y hablando entre nosotros, en una uno nos calla a todos y nos lo quedamos mirando.
—Que paso?— le pregunto.
—Shhhh escucha— me dice y hace una señal para que escuchemos.
Segundos despues de que hagamos silencio, escuchamos ramerio rompiendose otra vez, pero era raro, siguiendo el sonido, era como si lo que rompia las ramitas fuera de un lado a otro alrededor del campamento.
—WA!— grito mi amigo Carlos, imitando el grito de un zorro, a ver si respondia o se iba.
Y curiosamente funciono, el ruido paro de golpe.
—Que lo pario como ando— dijo.
Seguimos comiendo y hablando, casí a las 3, nos fuimos a acostar.
Yo me dormi bastante rapido ya que ese día anduve de un lado pa otro, y en cierto punto un ruido me despierta, otra vez, el ramerio rompiendose, pero ya a un nivel que parecia que habia gente alrededor corriendo entre el monte. Yo soy baqueano, es dificil asustarme en el monte, asique me levante llevado por la curiosidad, eso sí, con el facón en mano, no por miedo a los fantasmas, pero nunca se sabe cuando puede aparecer un loquito. Me levanto y el ruido seguia, era raro, por que a pesar de escucharlo moderadamente cerca, no veia nada, esa noche habia luna y no estaba completamente negro, pero no se veia ramerio moverse ni nada, y eso no concordaba con la cercania del sonido.
Entonces escucho un cierre abrirse, miro y era mi otro amigo Matias.
—Duermen bien che— le dije.
—Deja quieto, me desperto el ruido también.
Los otros dos se habian agarrado un pedo que dormirian hasta el día siguiente, eramos dos ahí.
—Tenes linterna?— le pregunte.
A lo que matias me la mostro.
—Y bueno, sera ver que es.
—Ni en pedo— me respondio.
—Dale loco yo con la duda no me quiero quedar—le dije, medio en joda, por que era verdad, seria algún bicho seguro, y yo queria ver que carajo era.
Ta, lo convenci y fuimos, el algo mas atras que yo me alumbraba, y aca paso lo primero que fue raro, mientras nos acercabamos, luego de cierto punto el ruido se alejaba, pero nunca paraba, era como que siempre estaba en movimiento, y a pesar de que alumbrabamos les juro que no veiamos nada.
En un punto el ruido paro y con Matias nos quedamos en medio del monte en silencio, alumbrando alrededor a ver que puta era.
—Hay la puta madre— dijo Matiaa algo sobresaltado pero sin gritar.
El ruido paso re cerca, pero sin mentirles, casi al lado de nosotros, senti clarito las hojas rompiendose en fila, ahí dejamos de buscar y volvimos al campamento. Yo en este punto ya pensaba que seria alguna vibora o algo que andaria media rara, por ahí tenia nido cerca del campamento y por eso estaba asi.
Ta, volvimos y el ruido habia parado otra vez, ahí ya quisimos irnos a dormir otra vez noma, pero Matias me señalo algo de lo que no me percate antes.
—Che y la leña?
Miro al monton de leña, solo quedaban unos pocos palos, miro al fogon, quedaban apenas unas brasas prendidas, habia pasado poco mas de una hora desde que nos habiamos ido a dormir, dejamos el fuego prendido con varios troncos gruesos y que no estaban del todo secos, no habia chance de que en ese tiempo se hubieran quemado tanto, y si así fue, donde estaba la leña del monton? Por que si uno de los pibes le metia mas, sin lugar a dudas estaria prendido ahora.
Ahí prendi la linterna y me puse a buscar alrededor con Matias, tenia que estar por ahí la leña, los otros dos estaba muy seguro de que no se habian despertado por el pedo que tenian.
Misteriosamente, no encontramos nada, ahí si ya nos perseguimos un poco, pero ta, decidimos no dar mas pelota y dormir noma, dejando los pocos palos que quedaban.
Estaba por entrar a mi carpa, y escucho un quejido de Matias, como si hubiera respirado ondo luego de aguantar la respiración, me doy vuelta y lo veo de espaldas, viendo con rumbo al fogon, duro.
—Que pasó?— le pregunto, no responde y seguia ahí.
Ya ahi me di cuenta que algo le habia pasado, me paro al lado, tenia la mirada fija a un punto, le sigo la dirección y un escalofrio me recorrio todo el cuerpo, como pocas veces en la vida me paso.
Por la luna les dije que no estaba todo completamente negro y podias ver un poco. Enseguida del fogon, sentado en uno de los troncos que quedaban, habia un hombre de espaldas, pero no una figura difusa que confundirias con algo mas, no era una pareidolia, era un hombre sentado de espaldas a nosotros. De una lo alumbre, y si, no era un fantasma, efectivamente habia una persona sentada ahí.
—Eh quien sos!— le dije con voz firme, sin gritar, pero ya habia desenfundado el facon, este debia ser un loquito si hacia eso en medio del monte.
No respondia. Le hice señas a Matias de que nos acercaramos.
Arrancamos despacio a acercarnos, siempre alumbrandolo, a los pocos metros, note que habia un movimiento en el, tipo no estaba quieto, era como si su cuerpo estuviera inquieto pero el se estuviera conteniendo, a la vez que escuchabamos un murmullo entre dientes.
Aca paso algo que me asusto, antes de que llegaramos, el loco se para de golpe, con Matias paramos y nos lo quedamos mirando.
Ahi el hombre dijo algo en voz baja, lo cual no entendimos bien.
—Que?— le pregunte yo.
El tipo hizo silencio unos segundos, con un movimiento erratico de su cuerpo, volteo y se saco la capucha, dejandonos verlo y emitiendo un grito con su mensaje, el cual hasta el día de hoy lo recuerdo.
—Buenas noches americaaaaaa!!!!
Era Marcelo Tineli! Arranco a sonar "Twist and shout" del medio del monte mientras el con una locura que nunca vi, se baja los pantalones y con una gran fuerza, se comenzo a meter los troncos de leña en el culo.
Matias no aguanto y perdio la conciencia, yo me le abalance pero Marcelo fue mas rapido y se perdio en la espesura del monte, con la poca leña que nos quedaba metida en el orto.
No pasamos la noche, desperte a todos y nos fuimos a la mierda de ahi, hasta el día de hoy sigo sin entender bien que paso, pero nunca mas volvi ahi.

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mira pinche perra de mierda, no haces ni puta madre como para que vengas a andar chingando con eso, ya acéptalo pendejo, acéptalo maldito hijo de puta, que te mire tu hermano malcom que lo aceptaste puto riz de mierda mejor ponte a cocinar y a comerte toda la mierda que dices por que no me afecta en ni puta madre ¿Escuchaste pendejo? Puto prieto que se cree premium por ser tremendo niño autista que se la jala con niñas de 7 años y que dice que me quiere presentar a su amiga por que se cree muy ligon en gran pendejo por que está bien idiota, que se cree que práctica muaytai pero cada vez que intenta hacer sus pataditas de niños autistas se le cae su bote de agua porque está bien estupido el pinche pendejo, aparte de eso el estupido no aguanta ni una sola palabra que le digas, ojalá aguantara así como aguanta las vergas de los negros de 3 metros con los que va a prestar su culo todo el puto día pero no, riz don pendejin se pone directo a """pegar""", me pegó más el sida su mamá que me follo todos los días a la perra puta cerda ingrata que siempre me da el culo demostrando lo puta que es como toda su puta descendencia de mierda pero como está bien idiota el pinche gay de jafet se pone a pelear porque está bien idiota y no sabe tener amigos pero en fin, supongo que ha de tener mucho contenido porno gay de malcom el de en medio que grabar, en el que se lo cojen 24/7 y él encantado da su prieto y negro culo por qué así es

Eu gostaria de uma opinião masculina (ou de mulheres que já passaram por isso)
Basicamente, eu nunca considerei assistir pornografia, que não seja de forma exagerada, traição dentro de um relacionamento e desde que comecei a namorar, sempre soube que meu namorado assistia (ambos temos 20 anos e fomos o primeiro um do outro). Porém, durante uma conversa recente, descobri que ele assiste com mais frequência do que eu imaginava e, as vezes, procurando por atrizes específicas e isso desecandeou uma puta insegurança em mim, pela comparação e por achar que não estou satisfazendo ele o suficiente ao ponto dele procurar minas específicas, seja em sexo ou em provocação do tipo enviar nudes e etc. Desde que soube disso, TODAS as vezes que mando uma investida, um nudes, vídeo mais sensual e ele não da uma elogiada a mais do que o comum, eu já penso que é porque ele prefere ver tal atriz, que não precisa de mim e isso vem acabando com minha líbido. Tenho parado de tomar iniciativas, até durante o sexo eu fico imaginando se ele está pensando em outra pessoa enquanto estamos ali e não consigo mais ter orgasmos por causa disso.
No dia que ele me contou isso, também afirmou que está tentando diminuir e até parar o consumo de vez, mas que se torna difícil por ter sido um hábito recorrente dele assistir esses vídeos ou tal atriz específica, porém tem tentado diminuir com o tempo, também afirmou que eu sou perfeita pra ele e que sente mt desejo em mim, que isso não é um problema que vem de mim, mas sim dele, só que mesmo assim não consigo acreditar 100% nisso.
Queria visões de outros homens sobre isso, se assistir porno coincide diretamente com a falta de satisfação com a parceira. E de mulheres que já passaram por isso, como lidaram até chegar ao ponto de seus parceiros largarem de vez?
Ps.: eu e ele temos uma comunicação muito aberta, aceito até sugestões de como pôr esse meu "incômodo" em palavras porque não consigo de fato explicar de um jeito que não vá o culpar...
Agradeço a todos que puderem me dar uma luz do que fazer e de como agir, até para poder o ajudar também <3

Pozdrav Reddit,
Dakle ovako, imam odredjeni broj drugara koji nemaju devojku a kukaju o tome a oni su krivi za to. Pitate se zasto?
Evo odgovora, nerelna ocekivanja od lepseg pola, dakle da krenemo.
Koliko puta ti koji citas ovo musko/zensko prodjes gradom i vidis neku osobu koja ti je privlacna fizicki i naravno komentarises to kako je lep/a, sta nosi itd itd da ne zalazimo.
E ovde je frka kada mi prodjemo svaku ama bas svaku devojku koju vidimo za njih je ruzna, i svaki odgovor na to im je - gledaj na sta izgleda?
Meni nije jasno sta ljudi traze od devojaka/momaka niste vi Brad Pitt pa da se na vas lozi svaka druga koja prodje pored tebe, oni se najvise loze na Pevaljke, glumice, porno-glumice, mada to je normalno dok ne trazis to uzivo mislim ono svako je imao u svom periodu zivota neki celebrity crush ali odrastite vise. (Pamela Anderson javi se bebo xoxo)
Posle toga ne vodis licnu higijenu, neobrijan si, nisi osisan, smrdi ti iz usta, oblacis se kao beskucnik i ti posle toga ocekujes da ce neka da te pogleda a da je nije zao tebe?
Jedan ortak iz detinjstva (ne druzimo se vise ali kad se vidimo popricamo) bata izgleda kao zombi, 60kg, bled u facu pije 4-5 ultre dnevno, igra WoW, LoL i ostala govna sta vec postoji od igrica, sretnemo se mi na stanici i znate vec kako krece prica sa nekim kog nisi video 100 godina sta se radi ovo ono, i on mi se pozali kako nema devojku, nijedna ga nece, ja ga pitam dobro brt sta ti trazis od devojke?
On: Pa brate da je jebem i tjt.
Ja: Sta mislis malo ono o izlascima, upoznavanje, veza mozda ako ti se posreci?
On: Ma jok da je jebem samo i otkacim.
Mene je posle toga molio i da mu nabacim neku sto je isla u osnovnu samnom ja mu kazem brt ne mogu nemam kontakt ne pratim je na instagram cak ni ja nisam nesto dobar sa njom.
Fast forward desetak dana, ja mu se javljam on okrece glavu ok ok.
Ja vodim brigu o sebi, trudim se da se lepse oblacim, vodim na higijenu i slicno i bilo mi je okej imao sam i devojke, i ja sam prilazio i nekad bi dobio instagram, nekad ne, i meni su par puta prisle devojke za instagram i to je to ne vidim sta je tesko.
A sada na kraju kao slag na torti,
riba iz razreda (4 godina sam) je ruzna kao ker, majke mi kad smo bili 2 godina starija generacija su joj dali nadimak goblin mozete da zamislite kakva je, znaci riba skace na kurac koliko smara i ulizica je i svi je sprdaju zbog toga, tripuje se da je nesto da ona moze da bira, i pazi sad ima 150cm, 75kg (dzak i po cement) mozda i vise i da cujete vi njene uslove za decka kakav mora da bude, ako ne ispunjava te uslove da joj se ne obraca:
-Sportista (Ona nije jer je debela svinja)
-Istetoviran
-Da ima plavu kosu i oci
-Da ima auto
Ne razumem dokle smo dosli da imamo ovako nerealne uslove jel ovo samo kod mene u okolini ili drugde?
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Fala Pessoal. Recentemente comecei um namoro. Vai fazer 3 meses/ 3 meses de conhecido. Total= 5 meses que conheço ela (M18) e eu (H18).
Nota: É meu primeiro namoro da minha vida, nunca fui me namorar com as meninas AKAKAKAKK sempre gostei de pegar as mina e sair sem querer algo a mais
**E eu sou o 4° namorado dela
A gente se dar super bem, tlgd? Eu estabeleci pra gente, pra nós sermos muito sincero um com outro e ser super transparente. E qualquer coisa que tiver incomodando já fala pra gente resolver sem enrolação Eu sou muito sincero e qualquer coisa eu já falo....Toda vez que algum cara dá em cima dela, ela vem e me manda print e tals... Ela nunca responde ou se responde ela zoa os cara de gado, ou manda eu responder no lugar dela. Ela sempre manda print falando que tal pessoa dá em cima dela.Ela diz pra mim que não vai esconder nada de mim. Então sempre que tem alguém dando em cima dela ela me manda print etc. E tipo ela não esconde o celular de mim , nem nada .. toda vez que a gente tá andando ela manda eu ficar com o celular dela no bolso etc. Eu sei a senha e tals . Já entrei no WhatsApp dela e tem os cara lá que ela fala,
Eu confio nela, só não confio nos amigos dela. Eu sou de (RJ) ela tmb é de (RJ). Porém ela tem família em (MG). Então a cada 2, 1 anos ela viaja com a mãe e irmão pra ver a família dela que está lá. E lá aonde família dela mora é aquelas cidades de inteiror que todo mundo conhece todo mundo. ela tem vários amigos que ela conhece de lá no WhatsApp, ela fala que são os amigos dela de (MG), são todos de lá, eu vi pelo o DDD. Ela me fala que o pessoal dessa cidade não presta... tanto as meninas quantos os meninos ( ela nasceu nessa cidade), É cada história envolvendo namoro, casamento, gravidez... Que só por Deus.
E ultimamente ela propôs pra gente troca rede social, porque eu dei like numa foto de uma menina e ela ficou puta. Aí eu falei pra ela se ela quisesse meu Instagram poderia pegar, pois eu não tenho nada a esconder. Aí ela falou que se eu desse o meu ela iria me dar o dela tmb. Assim foi E eu vi esses amigos dela dando reação nos story, chamando de linda, etc ela simplesmente não responde eles. ( Não sei se é porque eu tenho o insta dela agora), mas ela não responde eles. O pessoal dessa cidade eles são todo pra frente, saca? Os cara não liga pra nada. ( tenho por mim que esses cara tem segundas intenções) mesmo não sendo do nosso estado. Ela mesmo já me mostrou um que já quis ficar com ela. E os cara manda mensagem pra ela no WhatsApp só que ela não apaga esses cara, ela não responde eles , mas também não apaga eles. Eu não confio nos amigos dela , eu não confio pelo o fato dela falar que o povo da cidade não presta. Eu já vi mensagem de uns cara eles chamando ela de oii Bem, oii Amor.. só que ela sempre responde isso falando , Oi e o nome da pessoa. E as conversas sempre é do povo dessa cidade, falando sobre a cidade, falando da vida dos outros essas coisas.. ela fala com primos, amigas e amigos, tias, que moram lá
O ex namorado dela terminou porq ela viajou pra essa tal cidade e o namorado dela queria que ela desse atenção, mas só que ela (M18) , diz que estava em viagem a férias. E não tinha tempo pra ficar no WhatsApp dando tanta atenção pra ele, pois ela estava com a família dela e etc. Aí ele começou a desconfiar que dela com os amigos que ela tem nessa cidade. Ela falava que ele era muito grudento e isso enjoava ela
Obs: Não foi só por isso que o relacionamento dela terminou foi isso e mais alguns coisas. Que não tem muita a ver os amigos.
Só que recentemente eu vi uma mensagem dela com um amigo que ela fala muito, falando sobre esse relacionamento antigo dela, ela terminou por falta de confiança falando pra ele. Para mim ela disse a mesma coisa e mais algumas coisas que junto tudo e deu no término.
Eu nunca questionei essas coisas pra ela, só que dps que ela troco comigo o Instagram. Eu fiquei mais alerta nesses amigos dela. Tenho o Facebook e o Messenger dela.. Lá não tem muita coisa n , só tem os amigos dela falando que estão com sdds e que ela sumiu, e a mensagem que eu falei que vi no texto de cima foi lá. Que vi... De resto e uns cara da cidade dela e uns velhos. ( mas eu acho que ela não sabe que eu tenho acesso a essas duas redes sociais dela, só Instagram). E os amigos dela sempre chamam ela falando que ela sumiu e etc E ultimamente eu desconfio muito dos amigos dela , homem é homem. ( Já vi o WhatsApp dela, so que foi coisa rápida. Tem a mãe, irmão, tias e os amigos dela) . Nunca fui tão afundo e clonar o WhatsApp pra ver oq ela realmente fala de verdade atrás de tudo.
Não sei se é locura minha ou sla.... Sou babaca em pensar nisso?
Pessoal, não sei oq faço. Me dêem dicas e conselhos
E Desculpem por alguns erros de gramática..

Buenas noches tenemos otra historia espeluznante para ustedes esta noche, es una historia original en español y ambientada en madrid, cambiamos unas palabras para hacerla mas entendible a el publico latino
Les dejo el video aqui:https://youtu.be/P8R_doHR3LU
Y el Texto aqui
Todo ocurrió una cálida noche de verano, de ésas en las que, aunque la temperatura es agradable e invita a dar un largo paseo bajo la luz de las lamparas, da la sensación de que todo el mundo se ha puesto de acuerdo para encerrarse en casa.
Eran, más o menos, las dos de la madrugada. Había pasado varias horas vagueando ante la computadora, así que decidí que era momento de estirar los músculos haciendo algo de ejercicio, bajando a la calle para tirar la basura y fumar un cigarro, por ejemplo.
Me puse unos tenis deportivos , me dirigí a la cocina, saqué la bolsa del bote de basuray le hice un par de nudos. Tras asegurarme de que no olvidaba llaves, encendedor ni tabaco, cerré la puerta del piso y me dirigí a las escaleras abajo. Habría podido elegir tomar el ascensor, pero, teniendo en cuenta que a esos cacharros les suele dar por pararse de golpe, habría sido un error quedarme encerrado dentro con la única compañía de una maloliente bolsa de basura.
Recorrí los pocos metros que separaban mi portal de los contenedores, disfrutando del ambiente de soledad que reinaba en mi calle, unido a la tenue iluminación y la invisible caricia procedente del asfalto caliente bajo mis pies. Tras meter la bolsa en uno de los botes, volví a mi portal y, antes de entrar, encendí un cigarrillo, disfrutando de cada calada, mientras oía en la distancia el sonido de ambulancias y coches acelerando: la banda sonora que suena de fondo cada noche en la gran ciudad que es Madrid.
Mientras daba buena cuenta de mi cigarro, eché un ojo al gran edificio de viviendas que esperaba mi regreso: Un bloque levantado a finales de los años sesenta, con paredes de ladrillo rojizo, seis alturas y una planta de garaje bajo sus cimientos, similar a los cientos de edificios que, en aquella época, el Ministerio de Vivienda construyó en toda España.
Junto al portal, aún se conservaba la placa que daba fe de ello.
Mis padres fueron los primeros dueños de la casa. Tras el paso de los años, su afán ahorrador les permitió hacerse con una cabaña en las afueras, por lo que yo, siendo hijo único, tuve la suerte de pasar a ser el dueño (y único habitante), de la vivienda.
Cuando acabé el cigarrillo, tiré la colilla al suelo y entré en el portal.
Por un momento, pensé en subir andando hasta el quinto piso, donde vivo, pero la flojera pudo más, así que llamé al ascensor. Cuando éste llegó a la planta baja, entré en el.
Una de las curiosidades que tenía aquel edificio era dicho ascensor. No todos los bloques de viviendas de la época contaban con uno, y se consideraba una mezcla de lujo y suerte el poder llegar a casa en uno de estos cuando se levantó el edificio. Esto hacía que la estructura fuese algo vieja: sus paredes, sus espejos y su cuadro de botones tenían más de cincuenta años. Lo que más me llamaba la atención de este último detalle era el correspondiente al garaje. Había un botón para cada piso, excepto para el sótano, en cuyo lugar había una cerradura. Todos los vecinos teníamos copia de la llave.
El motivo era, según los constructores, evitar que el cálido garaje se llenase de mendigos por las noches.
Miré aquella cerradura con curiosidad. Aquella vieja cerradura. Entonces, una idea se me pasó por la cabeza. En lugar de pulsar el botón del quinto piso, eché mano al manojo de llaves que había en mi bolsillo e introduje la llave correspondiente. Para acceder al sótano, había que girar la llave hacia la izquierda, pero, ¿qué ocurriría si la giraba hacia la derecha?
Hice la prueba. Nada. La cerradura hacía tope, como era de esperar. Estupido, volví a intentarlo, girando con más fuerza. Con mucha más fuerza.
En ese momento, de forma inesperada, la cerradura cedió, poniendo el ascensor en marcha. Sorprendido ante aquello, fijé los ojos en el indicador luminoso. Mientras el ascensor descendía, aquél paso de mostrar un 0 a mostrar un -1.
Pero, llegado a este piso, el ascensor no se detuvo.
Durante casi un minuto, el trasto continuó bajando, traqueteando y rugiendo como de costumbre. El indicador luminoso mostraba dos guiones intermitentes. Entonces, de repente, el ascensor se detuvo y su puerta se abrió.
Ante mis ojos se extendía un largo y estrecho pasillo, apenas más ancho que el propio ascensor. La iluminación procedente del interior de éste no bastaba para iluminar aquel pasillo, que era engullido por una tenebrosa oscuridad, y no se apreciaban escaleras que llegasen allí desde un piso superior.
-¿Hola? Mi voz retumbó por las paredes y desapareció en el oscuro espacio.
A pesar de que la situación me imponía algo de respeto, la curiosidad ante el nuevo sótano recién descubierto pudo más. Decidido a investigar aquel lugar, encendí mi encendedor y abandoné la protectora luz del ascensor.
Me giré por un momento, y vi que, en aquella planta, no había botón para llamar al ascensor, sino una cerradura. confundido, continué avanzando hacia la oscuridad.
El ambiente era denso y húmedo, acompañado de una ligera fetidez. A unos veinte metros, el pasillo torcía hacia la derecha, desembocando en una galería a la que daban varias puertas, como en las cárceles que salen en las películas.
Algunas puertas estaban cerradas y otras abiertas, y el suelo estaba lleno de polvo, cristales rotos y otros objetos.
La mugre que invadía el lugar me disuadió de palpar la pared en busca de interruptores de luz, por lo que confié en la pequeña llama que portaba en mi mano. Al internarme en la galería, me agaché y acerqué mi encendedor al suelo para examinar con más detalle qué eran aquellos pequeños bultos que pisaba irremediablemente a cada paso. Descubrí jeringuillas, trozos de probetas, piezas de rompecabezas infantiles, muñecas… Aquello resultaba de lo más tétrico. Me incorporé nuevamente, disponiéndome a analizar las pequeñas dependencias que rodeaban la galería.
Uno de los detalles que percibí fue la falta de ventilación o iluminación exterior. Aunque era noche cerrada, no había rastro de salidas al exterior por las que se colase la luz de las lamparas, ni ninguna corriente de aire que hiciese vibrar a la llama de mi encendedor. Aquel era un lugar completamente cerrado, y a saber a cuántos metros bajo tierra me encontraba en aquel momento.
Recorrí varias de las salitas, y vi que todas tenían elementos en común: pequeños, anticuados y oxidados camastros, mesitas y sillas. Y material médico. El lugar estaba infestado de gasas, correas, pastillas desperdigadas por el suelo… Aquello parecía un hospital en miniatura. Un hospital antiguo y fantasmagórico, detenido en una época pasada, en el que la acumulación de polvo es el único indicador del paso del tiempo.
Aún me arrepiento de entrar en una de aquellas dependencias. La luz del encendedor mostraba, sobre el mugriento colchón, un bulto del tamaño de un ser humano, envuelto en ropa de hospital. Me acerqué sigilosamente, temiendo lo peor, y arrimé el encendedor al gran objeto.
El aumento de luz mostró una escena horripilante: rodeado de heces y manchas de orina, se mostraba ante mí un cadáver humano en posición fetal que me daba la espalda. El hedor era insoportable. Resisti el vomito mientras permanecía en cuclillas, ante aquella infernal escena.
De repente, el terror invadió mi cuerpo. Aquel cuerpo se giró de forma brusca y, lo que en principio había clasificado como “humano”, mostró ser algo diferente, indefinido e indescriptible.
El cuerpo de aquel ser estaba cubierto de llagas y heridas; en lugar manos y pies, sus extremidades se encontraban rematadas por extrañas deformidades y bultos recorrían su torso, dándole un aspecto monstruoso.
Pero lo peor era su rostro: sus ojos, grandes e inyectados en sangre, estaban protegidos por unos párpados abultados y sin pestañas. En lugar de pelo, su cabeza poseía infinidad de cicatrices y grapas que partían desde sus pobladas cejas y sienes y se perdían hacia su nuca. Sus orejas, irregulares y enormes, no mostraban pliegue alguno, dotando al ser de un aspecto simiesco. Tampoco poseía nariz, y de sus orificios nasales surgían dos hilos de sangre reseca. Rematando aquel cuadro tan desagradable, se encontraba su “boca”: un orificio de comisuras agrietadas, sin labios, de cuyo interior carente de dientes y lengua, provenía el peor olor a podrido que he percibido en mi vida.
Sus ojos se fijaron en los míos, y de su garganta surgió un bramido gutural, ronco y a la vez potente.
Grité. Grité con todas mis fuerzas y mi voz se entremezcló con la del monstruo. Teniendo en cuenta la postura en la que me encontraba, caí de espaldas sobre el mugriento suelo, y el encendedor se escapó de mi mano, dejando el lugar en la más absoluta oscuridad.
Mientras palpaba el suelo en busca del encendedor , oí cómo crujían los resortes del colchón y, antes de que pudiese reaccionar, aquel despojo se me echó encima, lanzando una vez más su aterrador alarido. Sentí su aliento contra mi rostro, mientras su apestosa saliva caía sobre mi frente, y un escalofrío me recorría de arriba abajo. Olvide el querer obtener mi encendedor y pataleé con todas mis fuerzas, tratando de zafarme del horripilante ser.
Me arrastré unos metros hacia atrás, me levanté y salí de la estancia, a oscuras, tratando de recordar la forma del piso, temiendo tropezar o golpearme con alguna de las paredes. Mientras huía en dirección al ascensor, pude oír cómo aquello se arrastraba entre los cristales rotos del suelo, siguiendo mis pasos.
Llegué al pasillo y sentí que volvía a la vida cuando me invadió la luz encendida del ascensor abierto. Entré, pulsé el botón del quinto piso y, lleno de impaciencia y pavor, esperé a que la puerta se cerrase y el ascensor se pusiese en marcha.
Sin embargo, el aparato no obedecía mis órdenes. Aunque el botón del quinto piso estaba encendido, la puerta no se cerraba. Y el crujir de cristales se oía cada vez más cerca. Me di media vuelta. Ante mí, el pasillo se extendía una vez más, engullendo la luz del ascensor. Sin embargo, ahora no sentía curiosidad ante aquella escena. Sentía verdadero horror. Quería huir de allí. Y el ascensor no se movía. De repente, se hizo el silencio.
Estaba tan aterrorizado que todos mis músculos se paralizaron. En ese momento, el ser surgió del pasillo oscuro, arrastrándose con una velocidad insólita. Venía hacia mí, mientras gruñía, jadeaba y chillaba como ninguna criatura conocida. Apreté repetidamente el botón del quinto piso, con pulso tembloroso, mientras el miedo me hacía llorar y la criatura se aproximaba rápidamente. Cuando estaba a punto de entrar en el ascensor, le tire una patada, lo que le hizo retroceder atemorizado, sin que apartase la vista de mis ojos en ningún momento.
En ese instante, las puertas se cerraron y el ascensor comenzó a subir.
Fijé la vista en el indicador luminoso: los dos guiones parpadeantes dieron paso a un -1, luego a un 0, un 1, y asi sucesivamente. Algo más calmado, me miré en el espejo y fui consciente de mi aspecto. Mi rostro estaba cubierto de una mezcla de baba y mucosa sangrienta, mezclada con mis propias lágrimas. Cuando quise pasar costado de la mano por mi frente, descubrí que mis ensangrentadas palmas estaban llenas de cristales rotos, y comencé a sentir su dolor; minutos antes, en aquel segundo sótano, el miedo no me había permitido ser consciente de cómo se habían clavado en mi piel.
Llegué a casa y entré corriendo al baño. Los recientes recuerdos de todo lo que había ocurrido allí abajo se agolparon en mi mente, y no pude evitar arrodillarme ante el escusado y vomitar la cena. Me di un baño más largo de lo habitual, aún invadido por el asco, curé las heridas de mis manos, y esperé a que llegase el día, incapaz de dormir.
A la mañana siguiente, cuando la luz del día se llevó todos mis miedos, llamé a un amigo que vivía en uno de los edificios cercanos.
Dicho edificio era similar al mío: construido en la misma época, con la misma planta, y con un ascensor exactamente similar. Tras contarle la historia y soportar sus burlas, me aseguró que haría la prueba en su ascensor, y que me llamaría para contarme qué había ocurrido en su caso.
Esperé su llamada ansiosoy, a los pocos minutos, sonó el teléfono. Era él, y su voz sonaba entrecortada y temblorosa. Bajo su casa también había un segundo sótano, húmedo y maloliente. Sin embargo, él no se había atrevido a adentrarse, y no tenía intención de hacerlo.
“No pienso volver a tomar ese ascensor en mi puta vida.” Eso fue lo que me dijo.
Y la verdad es que su opinión coincidía completamente con la mia.
A pesar de nuestros temores, nos decidimos a investigar sobre el asunto. Así, dimos con el que fue por aquel entonces presidente de la constructora encargada de levantar los edificios; hoy en día un anciano con un pie en el cementerio. Tras varias reticencias, nos explicó el por qué de aquellos sótanos secretos: en 1966, la recién inaugurada central nuclear de Zorita, en Guadalajara, había sufrido una grave fuga en uno de sus reactores, provocando una nube radiactiva que se extendió por los pueblos de los alrededores.
El régimen fresquista no podía permitir que la opinión pública tuviese noticia de un fallo en su primera instalación nuclear, por lo que contactó con las parejas jóvenes del lugar, ofreciéndoles trasladarse a Madrid, a los edificios en los que mi amigo y yo vivíamos, pues a pocos metros se encontraba un hospital que podría seguir la evolución de dichas parejas y los hijos que pudiesen tener en el futuro. Para disimular aún más la situación, vendieron algunas de las viviendas a gente corriente que no tenía nada que ver con el incidente (como mis padres, o los padres de mi amigo, por ejemplo).
Sin embargo, la intención del régimen era muy distinta: conocedores de las secuelas que la nube radiactiva tendría en esta gente, vigilaron cada nuevo embarazo que se produjo entre ellos, supervisando su evolución y haciendo “desaparecer” a todos aquellos recién nacidos que sufriesen graves malformaciones.
Aprovechaban la tranquilidad de la noche, para, haciéndose pasar por encargados de mudanzas, llevar a los bebés a su nuevo “hogar”. Aquellos sótanos, por otra parte, eran el lugar perfecto para realizar investigaciones sobre los niños, pues nadie sabía de su existencia.
El propio mecanismo de los ascensores se había mantenido en secreto, recayendo la tarea de llevar a cabo revisiones y reparaciones entre técnicos elegidos por el propio régimen; y una trampilla que sólo se abría cuando el ascensor sobrepasaba el garaje, ocultaba el segundo sótano a quien hubiese podido asomarse al hueco.
Sin embargo, tras la muerte del dictador Francisco Franco, se canceló aquel proyecto.
Tratando de arrojar tierra sobre el asunto, los sujetos en experimentación fueron sacrificados, y toda documentación relativa al proyecto fue destruida. Casi todos los cabos quedaron atados.
-¿Cómo que casi todos los cabos? Preguntamos mi amigo y yo a aquel hombre.
-Sí -dijo él-. Resulta que, una vez, aprovechando el revuelo de los últimos días, mientras todo el mundo corría arriba y abajo tratando de hacer desaparecer pruebas y evidencias, uno de los niños desapareció sin dejar rastro, y nadie más volvió a saber de él.
Mi amigo y yo nos miramos, aterrados. Nos despedimos del viejo y volvimos a nuestras casas.
Y desde entonces, no he vuelto a subirme a un ascensor. Y, por si a alguien le interesa, vendo mi casa. Es un quinto piso, muy luminoso. Y, además, tiene ascensor y garaje.

Buenas noches tenemos otra historia espeluznante para ustedes esta noche, es una historia original en español y ambientada en madrid, cambiamos unas palabras para hacerla mas entendible a el publico latino
Les dejo el video aqui:https://youtu.be/P8R_doHR3LU
Y el Texto aqui
Todo ocurrió una cálida noche de verano, de ésas en las que, aunque la temperatura es agradable e invita a dar un largo paseo bajo la luz de las lamparas, da la sensación de que todo el mundo se ha puesto de acuerdo para encerrarse en casa.
Eran, más o menos, las dos de la madrugada. Había pasado varias horas vagueando ante la computadora, así que decidí que era momento de estirar los músculos haciendo algo de ejercicio, bajando a la calle para tirar la basura y fumar un cigarro, por ejemplo.
Me puse unos tenis deportivos , me dirigí a la cocina, saqué la bolsa del bote de basuray le hice un par de nudos. Tras asegurarme de que no olvidaba llaves, encendedor ni tabaco, cerré la puerta del piso y me dirigí a las escaleras abajo. Habría podido elegir tomar el ascensor, pero, teniendo en cuenta que a esos cacharros les suele dar por pararse de golpe, habría sido un error quedarme encerrado dentro con la única compañía de una maloliente bolsa de basura.
Recorrí los pocos metros que separaban mi portal de los contenedores, disfrutando del ambiente de soledad que reinaba en mi calle, unido a la tenue iluminación y la invisible caricia procedente del asfalto caliente bajo mis pies. Tras meter la bolsa en uno de los botes, volví a mi portal y, antes de entrar, encendí un cigarrillo, disfrutando de cada calada, mientras oía en la distancia el sonido de ambulancias y coches acelerando: la banda sonora que suena de fondo cada noche en la gran ciudad que es Madrid.
Mientras daba buena cuenta de mi cigarro, eché un ojo al gran edificio de viviendas que esperaba mi regreso: Un bloque levantado a finales de los años sesenta, con paredes de ladrillo rojizo, seis alturas y una planta de garaje bajo sus cimientos, similar a los cientos de edificios que, en aquella época, el Ministerio de Vivienda construyó en toda España.
Junto al portal, aún se conservaba la placa que daba fe de ello.
Mis padres fueron los primeros dueños de la casa. Tras el paso de los años, su afán ahorrador les permitió hacerse con una cabaña en las afueras, por lo que yo, siendo hijo único, tuve la suerte de pasar a ser el dueño (y único habitante), de la vivienda.
Cuando acabé el cigarrillo, tiré la colilla al suelo y entré en el portal.
Por un momento, pensé en subir andando hasta el quinto piso, donde vivo, pero la flojera pudo más, así que llamé al ascensor. Cuando éste llegó a la planta baja, entré en el.
Una de las curiosidades que tenía aquel edificio era dicho ascensor. No todos los bloques de viviendas de la época contaban con uno, y se consideraba una mezcla de lujo y suerte el poder llegar a casa en uno de estos cuando se levantó el edificio. Esto hacía que la estructura fuese algo vieja: sus paredes, sus espejos y su cuadro de botones tenían más de cincuenta años. Lo que más me llamaba la atención de este último detalle era el correspondiente al garaje. Había un botón para cada piso, excepto para el sótano, en cuyo lugar había una cerradura. Todos los vecinos teníamos copia de la llave.
El motivo era, según los constructores, evitar que el cálido garaje se llenase de mendigos por las noches.
Miré aquella cerradura con curiosidad. Aquella vieja cerradura. Entonces, una idea se me pasó por la cabeza. En lugar de pulsar el botón del quinto piso, eché mano al manojo de llaves que había en mi bolsillo e introduje la llave correspondiente. Para acceder al sótano, había que girar la llave hacia la izquierda, pero, ¿qué ocurriría si la giraba hacia la derecha?
Hice la prueba. Nada. La cerradura hacía tope, como era de esperar. Estupido, volví a intentarlo, girando con más fuerza. Con mucha más fuerza.
En ese momento, de forma inesperada, la cerradura cedió, poniendo el ascensor en marcha. Sorprendido ante aquello, fijé los ojos en el indicador luminoso. Mientras el ascensor descendía, aquél paso de mostrar un 0 a mostrar un -1.
Pero, llegado a este piso, el ascensor no se detuvo.
Durante casi un minuto, el trasto continuó bajando, traqueteando y rugiendo como de costumbre. El indicador luminoso mostraba dos guiones intermitentes. Entonces, de repente, el ascensor se detuvo y su puerta se abrió.
Ante mis ojos se extendía un largo y estrecho pasillo, apenas más ancho que el propio ascensor. La iluminación procedente del interior de éste no bastaba para iluminar aquel pasillo, que era engullido por una tenebrosa oscuridad, y no se apreciaban escaleras que llegasen allí desde un piso superior.
-¿Hola? Mi voz retumbó por las paredes y desapareció en el oscuro espacio.
A pesar de que la situación me imponía algo de respeto, la curiosidad ante el nuevo sótano recién descubierto pudo más. Decidido a investigar aquel lugar, encendí mi encendedor y abandoné la protectora luz del ascensor.
Me giré por un momento, y vi que, en aquella planta, no había botón para llamar al ascensor, sino una cerradura. confundido, continué avanzando hacia la oscuridad.
El ambiente era denso y húmedo, acompañado de una ligera fetidez. A unos veinte metros, el pasillo torcía hacia la derecha, desembocando en una galería a la que daban varias puertas, como en las cárceles que salen en las películas.
Algunas puertas estaban cerradas y otras abiertas, y el suelo estaba lleno de polvo, cristales rotos y otros objetos.
La mugre que invadía el lugar me disuadió de palpar la pared en busca de interruptores de luz, por lo que confié en la pequeña llama que portaba en mi mano. Al internarme en la galería, me agaché y acerqué mi encendedor al suelo para examinar con más detalle qué eran aquellos pequeños bultos que pisaba irremediablemente a cada paso. Descubrí jeringuillas, trozos de probetas, piezas de rompecabezas infantiles, muñecas… Aquello resultaba de lo más tétrico. Me incorporé nuevamente, disponiéndome a analizar las pequeñas dependencias que rodeaban la galería.
Uno de los detalles que percibí fue la falta de ventilación o iluminación exterior. Aunque era noche cerrada, no había rastro de salidas al exterior por las que se colase la luz de las lamparas, ni ninguna corriente de aire que hiciese vibrar a la llama de mi encendedor. Aquel era un lugar completamente cerrado, y a saber a cuántos metros bajo tierra me encontraba en aquel momento.
Recorrí varias de las salitas, y vi que todas tenían elementos en común: pequeños, anticuados y oxidados camastros, mesitas y sillas. Y material médico. El lugar estaba infestado de gasas, correas, pastillas desperdigadas por el suelo… Aquello parecía un hospital en miniatura. Un hospital antiguo y fantasmagórico, detenido en una época pasada, en el que la acumulación de polvo es el único indicador del paso del tiempo.
Aún me arrepiento de entrar en una de aquellas dependencias. La luz del encendedor mostraba, sobre el mugriento colchón, un bulto del tamaño de un ser humano, envuelto en ropa de hospital. Me acerqué sigilosamente, temiendo lo peor, y arrimé el encendedor al gran objeto.
El aumento de luz mostró una escena horripilante: rodeado de heces y manchas de orina, se mostraba ante mí un cadáver humano en posición fetal que me daba la espalda. El hedor era insoportable. Resisti el vomito mientras permanecía en cuclillas, ante aquella infernal escena.
De repente, el terror invadió mi cuerpo. Aquel cuerpo se giró de forma brusca y, lo que en principio había clasificado como “humano”, mostró ser algo diferente, indefinido e indescriptible.
El cuerpo de aquel ser estaba cubierto de llagas y heridas; en lugar manos y pies, sus extremidades se encontraban rematadas por extrañas deformidades y bultos recorrían su torso, dándole un aspecto monstruoso.
Pero lo peor era su rostro: sus ojos, grandes e inyectados en sangre, estaban protegidos por unos párpados abultados y sin pestañas. En lugar de pelo, su cabeza poseía infinidad de cicatrices y grapas que partían desde sus pobladas cejas y sienes y se perdían hacia su nuca. Sus orejas, irregulares y enormes, no mostraban pliegue alguno, dotando al ser de un aspecto simiesco. Tampoco poseía nariz, y de sus orificios nasales surgían dos hilos de sangre reseca. Rematando aquel cuadro tan desagradable, se encontraba su “boca”: un orificio de comisuras agrietadas, sin labios, de cuyo interior carente de dientes y lengua, provenía el peor olor a podrido que he percibido en mi vida.
Sus ojos se fijaron en los míos, y de su garganta surgió un bramido gutural, ronco y a la vez potente.
Grité. Grité con todas mis fuerzas y mi voz se entremezcló con la del monstruo. Teniendo en cuenta la postura en la que me encontraba, caí de espaldas sobre el mugriento suelo, y el encendedor se escapó de mi mano, dejando el lugar en la más absoluta oscuridad.
Mientras palpaba el suelo en busca del encendedor , oí cómo crujían los resortes del colchón y, antes de que pudiese reaccionar, aquel despojo se me echó encima, lanzando una vez más su aterrador alarido. Sentí su aliento contra mi rostro, mientras su apestosa saliva caía sobre mi frente, y un escalofrío me recorría de arriba abajo. Olvide el querer obtener mi encendedor y pataleé con todas mis fuerzas, tratando de zafarme del horripilante ser.
Me arrastré unos metros hacia atrás, me levanté y salí de la estancia, a oscuras, tratando de recordar la forma del piso, temiendo tropezar o golpearme con alguna de las paredes. Mientras huía en dirección al ascensor, pude oír cómo aquello se arrastraba entre los cristales rotos del suelo, siguiendo mis pasos.
Llegué al pasillo y sentí que volvía a la vida cuando me invadió la luz encendida del ascensor abierto. Entré, pulsé el botón del quinto piso y, lleno de impaciencia y pavor, esperé a que la puerta se cerrase y el ascensor se pusiese en marcha.
Sin embargo, el aparato no obedecía mis órdenes. Aunque el botón del quinto piso estaba encendido, la puerta no se cerraba. Y el crujir de cristales se oía cada vez más cerca. Me di media vuelta. Ante mí, el pasillo se extendía una vez más, engullendo la luz del ascensor. Sin embargo, ahora no sentía curiosidad ante aquella escena. Sentía verdadero horror. Quería huir de allí. Y el ascensor no se movía. De repente, se hizo el silencio.
Estaba tan aterrorizado que todos mis músculos se paralizaron. En ese momento, el ser surgió del pasillo oscuro, arrastrándose con una velocidad insólita. Venía hacia mí, mientras gruñía, jadeaba y chillaba como ninguna criatura conocida. Apreté repetidamente el botón del quinto piso, con pulso tembloroso, mientras el miedo me hacía llorar y la criatura se aproximaba rápidamente. Cuando estaba a punto de entrar en el ascensor, le tire una patada, lo que le hizo retroceder atemorizado, sin que apartase la vista de mis ojos en ningún momento.
En ese instante, las puertas se cerraron y el ascensor comenzó a subir.
Fijé la vista en el indicador luminoso: los dos guiones parpadeantes dieron paso a un -1, luego a un 0, un 1, y asi sucesivamente. Algo más calmado, me miré en el espejo y fui consciente de mi aspecto. Mi rostro estaba cubierto de una mezcla de baba y mucosa sangrienta, mezclada con mis propias lágrimas. Cuando quise pasar costado de la mano por mi frente, descubrí que mis ensangrentadas palmas estaban llenas de cristales rotos, y comencé a sentir su dolor; minutos antes, en aquel segundo sótano, el miedo no me había permitido ser consciente de cómo se habían clavado en mi piel.
Llegué a casa y entré corriendo al baño. Los recientes recuerdos de todo lo que había ocurrido allí abajo se agolparon en mi mente, y no pude evitar arrodillarme ante el escusado y vomitar la cena. Me di un baño más largo de lo habitual, aún invadido por el asco, curé las heridas de mis manos, y esperé a que llegase el día, incapaz de dormir.
A la mañana siguiente, cuando la luz del día se llevó todos mis miedos, llamé a un amigo que vivía en uno de los edificios cercanos.
Dicho edificio era similar al mío: construido en la misma época, con la misma planta, y con un ascensor exactamente similar. Tras contarle la historia y soportar sus burlas, me aseguró que haría la prueba en su ascensor, y que me llamaría para contarme qué había ocurrido en su caso.
Esperé su llamada ansiosoy, a los pocos minutos, sonó el teléfono. Era él, y su voz sonaba entrecortada y temblorosa. Bajo su casa también había un segundo sótano, húmedo y maloliente. Sin embargo, él no se había atrevido a adentrarse, y no tenía intención de hacerlo.
“No pienso volver a tomar ese ascensor en mi puta vida.” Eso fue lo que me dijo.
Y la verdad es que su opinión coincidía completamente con la mia.
A pesar de nuestros temores, nos decidimos a investigar sobre el asunto. Así, dimos con el que fue por aquel entonces presidente de la constructora encargada de levantar los edificios; hoy en día un anciano con un pie en el cementerio. Tras varias reticencias, nos explicó el por qué de aquellos sótanos secretos: en 1966, la recién inaugurada central nuclear de Zorita, en Guadalajara, había sufrido una grave fuga en uno de sus reactores, provocando una nube radiactiva que se extendió por los pueblos de los alrededores.
El régimen fresquista no podía permitir que la opinión pública tuviese noticia de un fallo en su primera instalación nuclear, por lo que contactó con las parejas jóvenes del lugar, ofreciéndoles trasladarse a Madrid, a los edificios en los que mi amigo y yo vivíamos, pues a pocos metros se encontraba un hospital que podría seguir la evolución de dichas parejas y los hijos que pudiesen tener en el futuro. Para disimular aún más la situación, vendieron algunas de las viviendas a gente corriente que no tenía nada que ver con el incidente (como mis padres, o los padres de mi amigo, por ejemplo).
Sin embargo, la intención del régimen era muy distinta: conocedores de las secuelas que la nube radiactiva tendría en esta gente, vigilaron cada nuevo embarazo que se produjo entre ellos, supervisando su evolución y haciendo “desaparecer” a todos aquellos recién nacidos que sufriesen graves malformaciones.
Aprovechaban la tranquilidad de la noche, para, haciéndose pasar por encargados de mudanzas, llevar a los bebés a su nuevo “hogar”. Aquellos sótanos, por otra parte, eran el lugar perfecto para realizar investigaciones sobre los niños, pues nadie sabía de su existencia.
El propio mecanismo de los ascensores se había mantenido en secreto, recayendo la tarea de llevar a cabo revisiones y reparaciones entre técnicos elegidos por el propio régimen; y una trampilla que sólo se abría cuando el ascensor sobrepasaba el garaje, ocultaba el segundo sótano a quien hubiese podido asomarse al hueco.
Sin embargo, tras la muerte del dictador Francisco Franco, se canceló aquel proyecto.
Tratando de arrojar tierra sobre el asunto, los sujetos en experimentación fueron sacrificados, y toda documentación relativa al proyecto fue destruida. Casi todos los cabos quedaron atados.
-¿Cómo que casi todos los cabos? Preguntamos mi amigo y yo a aquel hombre.
-Sí -dijo él-. Resulta que, una vez, aprovechando el revuelo de los últimos días, mientras todo el mundo corría arriba y abajo tratando de hacer desaparecer pruebas y evidencias, uno de los niños desapareció sin dejar rastro, y nadie más volvió a saber de él.
Mi amigo y yo nos miramos, aterrados. Nos despedimos del viejo y volvimos a nuestras casas.
Y desde entonces, no he vuelto a subirme a un ascensor. Y, por si a alguien le interesa, vendo mi casa. Es un quinto piso, muy luminoso. Y, además, tiene ascensor y garaje.

Buenas noches tenemos otra historia espeluznante para ustedes esta noche, es una historia original en español y ambientada en madrid, cambiamos unas palabras para hacerla mas entendible a el publico latino
Les dejo el video aqui:https://youtu.be/P8R_doHR3LU
Y el Texto aqui
Todo ocurrió una cálida noche de verano, de ésas en las que, aunque la temperatura es agradable e invita a dar un largo paseo bajo la luz de las lamparas, da la sensación de que todo el mundo se ha puesto de acuerdo para encerrarse en casa.
Eran, más o menos, las dos de la madrugada. Había pasado varias horas vagueando ante la computadora, así que decidí que era momento de estirar los músculos haciendo algo de ejercicio, bajando a la calle para tirar la basura y fumar un cigarro, por ejemplo.
Me puse unos tenis deportivos , me dirigí a la cocina, saqué la bolsa del bote de basuray le hice un par de nudos. Tras asegurarme de que no olvidaba llaves, encendedor ni tabaco, cerré la puerta del piso y me dirigí a las escaleras abajo. Habría podido elegir tomar el ascensor, pero, teniendo en cuenta que a esos cacharros les suele dar por pararse de golpe, habría sido un error quedarme encerrado dentro con la única compañía de una maloliente bolsa de basura.
Recorrí los pocos metros que separaban mi portal de los contenedores, disfrutando del ambiente de soledad que reinaba en mi calle, unido a la tenue iluminación y la invisible caricia procedente del asfalto caliente bajo mis pies. Tras meter la bolsa en uno de los botes, volví a mi portal y, antes de entrar, encendí un cigarrillo, disfrutando de cada calada, mientras oía en la distancia el sonido de ambulancias y coches acelerando: la banda sonora que suena de fondo cada noche en la gran ciudad que es Madrid.
Mientras daba buena cuenta de mi cigarro, eché un ojo al gran edificio de viviendas que esperaba mi regreso: Un bloque levantado a finales de los años sesenta, con paredes de ladrillo rojizo, seis alturas y una planta de garaje bajo sus cimientos, similar a los cientos de edificios que, en aquella época, el Ministerio de Vivienda construyó en toda España.
Junto al portal, aún se conservaba la placa que daba fe de ello.
Mis padres fueron los primeros dueños de la casa. Tras el paso de los años, su afán ahorrador les permitió hacerse con una cabaña en las afueras, por lo que yo, siendo hijo único, tuve la suerte de pasar a ser el dueño (y único habitante), de la vivienda.
Cuando acabé el cigarrillo, tiré la colilla al suelo y entré en el portal.
Por un momento, pensé en subir andando hasta el quinto piso, donde vivo, pero la flojera pudo más, así que llamé al ascensor. Cuando éste llegó a la planta baja, entré en el.
Una de las curiosidades que tenía aquel edificio era dicho ascensor. No todos los bloques de viviendas de la época contaban con uno, y se consideraba una mezcla de lujo y suerte el poder llegar a casa en uno de estos cuando se levantó el edificio. Esto hacía que la estructura fuese algo vieja: sus paredes, sus espejos y su cuadro de botones tenían más de cincuenta años. Lo que más me llamaba la atención de este último detalle era el correspondiente al garaje. Había un botón para cada piso, excepto para el sótano, en cuyo lugar había una cerradura. Todos los vecinos teníamos copia de la llave.
El motivo era, según los constructores, evitar que el cálido garaje se llenase de mendigos por las noches.
Miré aquella cerradura con curiosidad. Aquella vieja cerradura. Entonces, una idea se me pasó por la cabeza. En lugar de pulsar el botón del quinto piso, eché mano al manojo de llaves que había en mi bolsillo e introduje la llave correspondiente. Para acceder al sótano, había que girar la llave hacia la izquierda, pero, ¿qué ocurriría si la giraba hacia la derecha?
Hice la prueba. Nada. La cerradura hacía tope, como era de esperar. Estupido, volví a intentarlo, girando con más fuerza. Con mucha más fuerza.
En ese momento, de forma inesperada, la cerradura cedió, poniendo el ascensor en marcha. Sorprendido ante aquello, fijé los ojos en el indicador luminoso. Mientras el ascensor descendía, aquél paso de mostrar un 0 a mostrar un -1.
Pero, llegado a este piso, el ascensor no se detuvo.
Durante casi un minuto, el trasto continuó bajando, traqueteando y rugiendo como de costumbre. El indicador luminoso mostraba dos guiones intermitentes. Entonces, de repente, el ascensor se detuvo y su puerta se abrió.
Ante mis ojos se extendía un largo y estrecho pasillo, apenas más ancho que el propio ascensor. La iluminación procedente del interior de éste no bastaba para iluminar aquel pasillo, que era engullido por una tenebrosa oscuridad, y no se apreciaban escaleras que llegasen allí desde un piso superior.
-¿Hola? Mi voz retumbó por las paredes y desapareció en el oscuro espacio.
A pesar de que la situación me imponía algo de respeto, la curiosidad ante el nuevo sótano recién descubierto pudo más. Decidido a investigar aquel lugar, encendí mi encendedor y abandoné la protectora luz del ascensor.
Me giré por un momento, y vi que, en aquella planta, no había botón para llamar al ascensor, sino una cerradura. confundido, continué avanzando hacia la oscuridad.
El ambiente era denso y húmedo, acompañado de una ligera fetidez. A unos veinte metros, el pasillo torcía hacia la derecha, desembocando en una galería a la que daban varias puertas, como en las cárceles que salen en las películas.
Algunas puertas estaban cerradas y otras abiertas, y el suelo estaba lleno de polvo, cristales rotos y otros objetos.
La mugre que invadía el lugar me disuadió de palpar la pared en busca de interruptores de luz, por lo que confié en la pequeña llama que portaba en mi mano. Al internarme en la galería, me agaché y acerqué mi encendedor al suelo para examinar con más detalle qué eran aquellos pequeños bultos que pisaba irremediablemente a cada paso. Descubrí jeringuillas, trozos de probetas, piezas de rompecabezas infantiles, muñecas… Aquello resultaba de lo más tétrico. Me incorporé nuevamente, disponiéndome a analizar las pequeñas dependencias que rodeaban la galería.
Uno de los detalles que percibí fue la falta de ventilación o iluminación exterior. Aunque era noche cerrada, no había rastro de salidas al exterior por las que se colase la luz de las lamparas, ni ninguna corriente de aire que hiciese vibrar a la llama de mi encendedor. Aquel era un lugar completamente cerrado, y a saber a cuántos metros bajo tierra me encontraba en aquel momento.
Recorrí varias de las salitas, y vi que todas tenían elementos en común: pequeños, anticuados y oxidados camastros, mesitas y sillas. Y material médico. El lugar estaba infestado de gasas, correas, pastillas desperdigadas por el suelo… Aquello parecía un hospital en miniatura. Un hospital antiguo y fantasmagórico, detenido en una época pasada, en el que la acumulación de polvo es el único indicador del paso del tiempo.
Aún me arrepiento de entrar en una de aquellas dependencias. La luz del encendedor mostraba, sobre el mugriento colchón, un bulto del tamaño de un ser humano, envuelto en ropa de hospital. Me acerqué sigilosamente, temiendo lo peor, y arrimé el encendedor al gran objeto.
El aumento de luz mostró una escena horripilante: rodeado de heces y manchas de orina, se mostraba ante mí un cadáver humano en posición fetal que me daba la espalda. El hedor era insoportable. Resisti el vomito mientras permanecía en cuclillas, ante aquella infernal escena.
De repente, el terror invadió mi cuerpo. Aquel cuerpo se giró de forma brusca y, lo que en principio había clasificado como “humano”, mostró ser algo diferente, indefinido e indescriptible.
El cuerpo de aquel ser estaba cubierto de llagas y heridas; en lugar manos y pies, sus extremidades se encontraban rematadas por extrañas deformidades y bultos recorrían su torso, dándole un aspecto monstruoso.
Pero lo peor era su rostro: sus ojos, grandes e inyectados en sangre, estaban protegidos por unos párpados abultados y sin pestañas. En lugar de pelo, su cabeza poseía infinidad de cicatrices y grapas que partían desde sus pobladas cejas y sienes y se perdían hacia su nuca. Sus orejas, irregulares y enormes, no mostraban pliegue alguno, dotando al ser de un aspecto simiesco. Tampoco poseía nariz, y de sus orificios nasales surgían dos hilos de sangre reseca. Rematando aquel cuadro tan desagradable, se encontraba su “boca”: un orificio de comisuras agrietadas, sin labios, de cuyo interior carente de dientes y lengua, provenía el peor olor a podrido que he percibido en mi vida.
Sus ojos se fijaron en los míos, y de su garganta surgió un bramido gutural, ronco y a la vez potente.
Grité. Grité con todas mis fuerzas y mi voz se entremezcló con la del monstruo. Teniendo en cuenta la postura en la que me encontraba, caí de espaldas sobre el mugriento suelo, y el encendedor se escapó de mi mano, dejando el lugar en la más absoluta oscuridad.
Mientras palpaba el suelo en busca del encendedor , oí cómo crujían los resortes del colchón y, antes de que pudiese reaccionar, aquel despojo se me echó encima, lanzando una vez más su aterrador alarido. Sentí su aliento contra mi rostro, mientras su apestosa saliva caía sobre mi frente, y un escalofrío me recorría de arriba abajo. Olvide el querer obtener mi encendedor y pataleé con todas mis fuerzas, tratando de zafarme del horripilante ser.
Me arrastré unos metros hacia atrás, me levanté y salí de la estancia, a oscuras, tratando de recordar la forma del piso, temiendo tropezar o golpearme con alguna de las paredes. Mientras huía en dirección al ascensor, pude oír cómo aquello se arrastraba entre los cristales rotos del suelo, siguiendo mis pasos.
Llegué al pasillo y sentí que volvía a la vida cuando me invadió la luz encendida del ascensor abierto. Entré, pulsé el botón del quinto piso y, lleno de impaciencia y pavor, esperé a que la puerta se cerrase y el ascensor se pusiese en marcha.
Sin embargo, el aparato no obedecía mis órdenes. Aunque el botón del quinto piso estaba encendido, la puerta no se cerraba. Y el crujir de cristales se oía cada vez más cerca. Me di media vuelta. Ante mí, el pasillo se extendía una vez más, engullendo la luz del ascensor. Sin embargo, ahora no sentía curiosidad ante aquella escena. Sentía verdadero horror. Quería huir de allí. Y el ascensor no se movía. De repente, se hizo el silencio.
Estaba tan aterrorizado que todos mis músculos se paralizaron. En ese momento, el ser surgió del pasillo oscuro, arrastrándose con una velocidad insólita. Venía hacia mí, mientras gruñía, jadeaba y chillaba como ninguna criatura conocida. Apreté repetidamente el botón del quinto piso, con pulso tembloroso, mientras el miedo me hacía llorar y la criatura se aproximaba rápidamente. Cuando estaba a punto de entrar en el ascensor, le tire una patada, lo que le hizo retroceder atemorizado, sin que apartase la vista de mis ojos en ningún momento.
En ese instante, las puertas se cerraron y el ascensor comenzó a subir.
Fijé la vista en el indicador luminoso: los dos guiones parpadeantes dieron paso a un -1, luego a un 0, un 1, y asi sucesivamente. Algo más calmado, me miré en el espejo y fui consciente de mi aspecto. Mi rostro estaba cubierto de una mezcla de baba y mucosa sangrienta, mezclada con mis propias lágrimas. Cuando quise pasar costado de la mano por mi frente, descubrí que mis ensangrentadas palmas estaban llenas de cristales rotos, y comencé a sentir su dolor; minutos antes, en aquel segundo sótano, el miedo no me había permitido ser consciente de cómo se habían clavado en mi piel.
Llegué a casa y entré corriendo al baño. Los recientes recuerdos de todo lo que había ocurrido allí abajo se agolparon en mi mente, y no pude evitar arrodillarme ante el escusado y vomitar la cena. Me di un baño más largo de lo habitual, aún invadido por el asco, curé las heridas de mis manos, y esperé a que llegase el día, incapaz de dormir.
A la mañana siguiente, cuando la luz del día se llevó todos mis miedos, llamé a un amigo que vivía en uno de los edificios cercanos.
Dicho edificio era similar al mío: construido en la misma época, con la misma planta, y con un ascensor exactamente similar. Tras contarle la historia y soportar sus burlas, me aseguró que haría la prueba en su ascensor, y que me llamaría para contarme qué había ocurrido en su caso.
Esperé su llamada ansiosoy, a los pocos minutos, sonó el teléfono. Era él, y su voz sonaba entrecortada y temblorosa. Bajo su casa también había un segundo sótano, húmedo y maloliente. Sin embargo, él no se había atrevido a adentrarse, y no tenía intención de hacerlo.
“No pienso volver a tomar ese ascensor en mi puta vida.” Eso fue lo que me dijo.
Y la verdad es que su opinión coincidía completamente con la mia.
A pesar de nuestros temores, nos decidimos a investigar sobre el asunto. Así, dimos con el que fue por aquel entonces presidente de la constructora encargada de levantar los edificios; hoy en día un anciano con un pie en el cementerio. Tras varias reticencias, nos explicó el por qué de aquellos sótanos secretos: en 1966, la recién inaugurada central nuclear de Zorita, en Guadalajara, había sufrido una grave fuga en uno de sus reactores, provocando una nube radiactiva que se extendió por los pueblos de los alrededores.
El régimen fresquista no podía permitir que la opinión pública tuviese noticia de un fallo en su primera instalación nuclear, por lo que contactó con las parejas jóvenes del lugar, ofreciéndoles trasladarse a Madrid, a los edificios en los que mi amigo y yo vivíamos, pues a pocos metros se encontraba un hospital que podría seguir la evolución de dichas parejas y los hijos que pudiesen tener en el futuro. Para disimular aún más la situación, vendieron algunas de las viviendas a gente corriente que no tenía nada que ver con el incidente (como mis padres, o los padres de mi amigo, por ejemplo).
Sin embargo, la intención del régimen era muy distinta: conocedores de las secuelas que la nube radiactiva tendría en esta gente, vigilaron cada nuevo embarazo que se produjo entre ellos, supervisando su evolución y haciendo “desaparecer” a todos aquellos recién nacidos que sufriesen graves malformaciones.
Aprovechaban la tranquilidad de la noche, para, haciéndose pasar por encargados de mudanzas, llevar a los bebés a su nuevo “hogar”. Aquellos sótanos, por otra parte, eran el lugar perfecto para realizar investigaciones sobre los niños, pues nadie sabía de su existencia.
El propio mecanismo de los ascensores se había mantenido en secreto, recayendo la tarea de llevar a cabo revisiones y reparaciones entre técnicos elegidos por el propio régimen; y una trampilla que sólo se abría cuando el ascensor sobrepasaba el garaje, ocultaba el segundo sótano a quien hubiese podido asomarse al hueco.
Sin embargo, tras la muerte del dictador Francisco Franco, se canceló aquel proyecto.
Tratando de arrojar tierra sobre el asunto, los sujetos en experimentación fueron sacrificados, y toda documentación relativa al proyecto fue destruida. Casi todos los cabos quedaron atados.
-¿Cómo que casi todos los cabos? Preguntamos mi amigo y yo a aquel hombre.
-Sí -dijo él-. Resulta que, una vez, aprovechando el revuelo de los últimos días, mientras todo el mundo corría arriba y abajo tratando de hacer desaparecer pruebas y evidencias, uno de los niños desapareció sin dejar rastro, y nadie más volvió a saber de él.
Mi amigo y yo nos miramos, aterrados. Nos despedimos del viejo y volvimos a nuestras casas.
Y desde entonces, no he vuelto a subirme a un ascensor. Y, por si a alguien le interesa, vendo mi casa. Es un quinto piso, muy luminoso. Y, además, tiene ascensor y garaje.